Poderosa e imparable. Ahora me dirás, ¿por qué? Porque no la puedes frenar, ya que ni va a tolerar gilipolleces ni se va a quedar con personas que no estén a su altura. Además, romperá con cualquier cosa que le haga daño y soltará por mucho que ame todo lo que le impide evolucionar. Es algo así como «o me aportas o te aparto, porque he venido a pisar fuerte». A veces, me llego a impresionar al ver lo grande que es el poder que tiene el amor de una madre por sus hijos, porque moverá cielo y tierra con tal de que estén bien.
El respeto para este tipo de mujer es fundamental y los límites importantísimos. No es un reto sencillo amarla porque te pondrá en tu sitio si la intentas destruir y la verás tremendamente fuerte y guerrera. Esto causará dos cosas: o que no tengas la confianza de tenerla a tu lado y la dejes ir o que te armes de valentía para sacar tu mejor versión y así poder ir a su ritmo y prosperar. Hará que te conviertas en un digno compañero o en un lastre óptimo para ser enviado al foso si así lo ve pertinente.
Encontrarte con alguien así o te hace evolucionar o te cambia, pero no te resulta indiferente. Una huella dejará en ti, ya sea como amiga, pareja, profesora, vecina, hija… U otro rol.